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El diagnóstico temprano de diabetes puede prevenir el daño permanente a los riñones y los nervios. Sin embargo, los expertos advierten que hay muchos pacientes con diabetes no diagnosticados que tienen síntomas pero que desconocen la causa.
Las mujeres que no tienen problemas de peso, no son menopáusicas y no tienen factores genéticos para el desarrollo de diabetes, aún deben informar a su médico sobre la aparición de algunos de los síntomas.
Algunos de los síntomas comunes de la diabetes en las mujeres son:
Infecciones frecuentes del tracto urinario
Puede ser propensa a infecciones urinarias y otras infecciones vaginales, sin embargo, si nota que empeoran repentinamente, puede ser un signo de prediabetes. Precisamente debido a los altos niveles de azúcar, estas infecciones se están volviendo más comunes, más comúnmente hongos.
Sed constante
Cuando los niveles de azúcar en la sangre son altos, la cantidad de sodio en la sangre disminuye. Es decir, el sodio ayuda al cuerpo a retener agua, por lo que una caída de sodio puede aumentar la sed. El aumento de la ingesta de agua solo resolverá temporalmente el problema, por lo que si tiene más sed que antes y bebe la misma cantidad de agua, esto puede ser una señal de advertencia.
Visión distorsionada
La glucosa en sangre puede ingresar a la lente del ojo y distorsionar la visión. Los alimentos como la fruta y el pan tienden a elevar el azúcar en la sangre en los diabéticos. Si nota que su visión es extraña después de comer este alimento, esta es otra señal de advertencia.
Visitas frecuentes al baño
Como el nivel alto de azúcar en la sangre causa una caída en el sodio en la sangre, el cuerpo tendrá problemas para mantenerse hidratado, incluso si bebe mucha agua. En lugar de mantener esa agua, eventualmente tendrá que ir al baño todo el tiempo.
Confusión
La deshidratación puede conducir a confusión o confusión. Investigaciones recientes muestran que el nivel alto de azúcar en la sangre también puede causar una falta de flexibilidad vascular en el cerebro, lo que reduce el oxígeno al cerebro, promueve la inflamación y puede generar sentimientos de confusión.
Fatiga frecuente
La fatiga frecuente es otra consecuencia de la hidratación insuficiente del cuerpo. Es decir, el cuerpo lucha para superar el aumento de glucosa en la sangre, y esto puede provocar un agotamiento severo. La investigación también ha demostrado que los problemas relacionados con el sueño son más comunes en los diabéticos.
Hambre frecuente
La diabetes limita la capacidad de su cuerpo para mover adecuadamente el azúcar del torrente sanguíneo a sus células, donde se almacena y se utiliza para obtener energía. Debido al hecho de que el cuerpo no recibe suficiente energía, los pacientes con diabetes pueden experimentar un hambre constante.
Cicatrización lenta
Una persona que tiene un nivel alto de azúcar en la sangre a la larga puede tener problemas con la cicatrización de heridas. La diabetes puede reducir el flujo sanguíneo en las extremidades, lo que puede ralentizar el proceso.